Un pack de entrada. ¡Cosas de Gerentes!

 - ¡No Irma! Estas fotos no me sirven. Necesito más exposición. Necesito ver más. – exclamó Giovanni desesperado.

 - Es lo mejor que pude hacer. ¡Soy ingeniera industrial no fotógrafa! – respondió secamente Irma.

 - Tómale las fotos otra vez.

 - La chica ya se fue.

 - Agenda otra cita para mañana temprano. Cítala para las 7am.

 - A las 7am tengo mi junta diaria de revisión con el equipo del segundo turno.

 - Dile a los del segundo turno que se esperen. Esto es prioridad Irma, y fin de la conversación.

 

La empresa DanceWithUs Inc. buscaba con urgencia un profesionista para ocupar el puesto vacante de Ingeniero de Calidad. Se buscaba un perfil de ingeniero industrial con maestría en administración de empresas, bilingüe al cien por ciento, con diez años de experiencia en puesto similar, y con amplia disponibilidad para viajar al extranjero. Sexo indistinto, aunque en la práctica todo mundo sabía que esto era un embuste.

Giovanni Márquez Casanova era el gerente del departamento de Calidad y tenía prisa por realizar la contratación. En dos semanas tenía programada una serie de visitas a clientes en la unión americana, principalmente en el estado de Michigan, y aún no tenía definida a la persona que lo acompañaría.

Para este tipo de eventos, lo más normal era que lo acompañara su segundo de a bordo en la escala jerárquica, Irma Valencia Azuela, superintendente del mismo departamento. Sin embargo, Irma no se desempeñaba bien en dichas reuniones, principalmente por su bajo nivel de Inglés. Además, en las noches, por política empresarial,  generalmente se invitaba a los clientes a cenar, a bailar y a beber algunos tragos. Irma detestaba eso.

La candidata se presentó a la entrevista a la mañana siguiente. Llegó puntual a la cita y lista para una nueva sesión de fotos. Esta vez eligió una minifalda de cuero color negra, ajustada y con aberturas en la parte frontal. Blusa entallada color azul marino, medias negras y zapato de tacón cerrado.

La sesión dio inicio y veinte minutos después, las fotos eran analizadas detenidamente por Giovanni en su celular iPhone 7. Era la indicada. Su experiencia en puesto similar era nulo y su inglés era muy básico. Debido a su juventud (contaba con veintidós años apenas), no poseía aún estudios de posgrado, solo un título en Turismo y Hotelería. Aún así, parecía la indicada. 

Buena estatura, porte, elegancia, simpatía, un cuerpo forjado en gimnasio, y dos hermosos ojos color aceituna, hacían de ella la candidata idónea para el puesto.

 - Pregúntale si tiene novio – requirió Giovanni por el celular.

Diez minutos más tarde, la candidata firmaba un contrato temporal por tres meses en las oficinas de Recursos Humanos. Era la más calificada para el puesto.

No tenía novio.

 ¡Cosas de Gerentes!