La Marea Rosa

 



El Zócalo de la ciudad de México recibió la mañana de hoy, 19 de mayo del 2024, a miles de personas para una manifestación pacífica en favor del partido de la coalición Fuerza y Corazón por México, integrado por los partidos PRI, PAN y PRD.

Las calles y avenidas que desembocan en el Zócalo se vieron abarrotadas por miles de manifestantes, que ante la inmensa asistencia tuvieron que permanecer en la periferia y apoyar el evento desde lejos. Lo hicieron de manera pacífica, respetuosa y animada.

No hubo gente acarreada como suelen hacerlo otros partidos.

No hubo repartición de billetes de cien pesos.

No hubo repartición de tortas de jamón ni de queso amarillo.

No hubo reparto de refrescos.

No hubo burócratas obligados a asistir.

No hubo pases de lista con ningún líder.

Tampoco hubo cientos de autobuses procedentes de otros estados de la república, y por consiguiente no hubo embotellamientos en las avenidas principales.

No hubo tampoco grupos musicales para animar y convencer a la gente para asistir.

Solo hubo ciudadanos capitalinos libres que con sus propios medios y por voluntad propia, decidieron apersonarse en la explanada del Zócalo. Solo eso. Ellos llevaban su propia agua, sus banderas, y su convicción de estar haciendo lo correcto.

En el camino tuvieron que enfrentarse a obstáculos ofrecidos generosamente por las fuerzas del poder capitalino.

Primero, la orden del presidente de la república de quitar la bandera nacional por cuestiones de seguridad. Una carta de la candidata opositora exigiendo el izamiento de la bandera, lo hizo cambiar de opinión. La bandera es de todos los Mexicanos le dijeron.

Finalmente la bandera se izó, radiante y hermosa.

Después, el anuncio improvisado del Hoy No Circula que afectaría a decenas de miles de manifestantes. Eso al parecer no los detuvo.

Posteriormente el tema del color de la camiseta. El partido en el poder convenció al INE de que el color rosa era propiedad de esta institución y solicitó que se prohibiera su uso durante la manifestación. El INE dio entrada a la petición y solicitó a los organizadores de la marcha que no usaran dicho color. Los organizadores y el pueblo en general reflexionaron y concluyeron que el color rosa no es propiedad de nadie. De hecho, ningún color lo es. Los colores los regala la naturaleza, bella, generosa, y radiantemente multicolor.

Cuando ya se creían superados todos los obstáculos, apareció uno nuevo y más violento: la CNTE.

Este sindicato de pseudo maestros decidieron hacer un plantón en el zócalo para exigir al gobierno solo Dios sabe que cosas. Y les gustó el día de la marcha para ello. Los porros de la CNTE instalaron vallas en las calles Venustiano Carranza y 20 de Noviembre con la intención de impedir el paso de los manifestantes al Zócalo. Hubo protestas, insultos, empujones y golpes de los porros hacia los pacíficos manifestantes. Que más se podía esperar. Al final, los porros fueron arrinconados y sellados en un área pegada al Palacio Nacional.

Si lo anterior no era suficiente, el partido en el poder, ese que lleva años gastando fortunas en anuncios espectaculares no reportados al INE, solicitó que los gastos de la manifestación se adjudicaran como gastos de campaña de la candidata de la coalición. Los organizadores esbozaron una sonrisa y aceptaron la imposición sin protestar.

Después de todo, no hubo gastos de transporte, ni para las tortas de jamón, ni para los chescos, ni hubo reparto individual de billetes de cien pesos. Es más, ni siquiera gastaron en papel y lápiz para pasar lista.

Fue un evento de Convocados, no de Acarreados.

Los oradores del evento fueron los dos candidatos principales de la coalición Fuerza y Corazón por México: Santiago y Xóchitl.

Ambos encendieron los ánimos de todos los asistentes con poderosos discursos, cargados de exhortaciones y de llamados a defender la democracia, la paz y la libertad; y sobre todo, cargados de amplias dosis de verdad.

Los dados están echados.

El pueblo, bueno y sabio, tiene ahora la última palabra.

Porque en nuestro México lindo y querido, el pueblo pone, y el pueblo quita.


Comentarios

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

Una charla familiar

Mi Tía. El más grande regalo.

Las Científicas - Una historia familiar.