La vida de Chuck | La película.

 



Chuck es un hombre de 39 años al que le han diagnosticado una enfermedad degenerativa e incurable. Sus días están contados y conforme pasa el tiempo su capacidad cognitiva se deteriora irremediablemente. Por las noches tiene sueños muy raros. Realidad y fantasía se funden en una sinfonía de memorias del pasado mezcladas con situaciones absurdas y en algunos casos, catastróficas.

Por momentos Chuck se escapa de su realidad sin darse cuenta, pero siempre regresa a los brazos de su joven y bella esposa. Ella lo espera de sus sueños para alimentarlo y vestirlo.

Chuck es un exitoso contador público, con una vida rutinaria y sin sobresaltos. Con una mente cuadrada, enfocada en su trabajo, su familia y los números. Números y más números. Sus clientes lo respetan y admiran, y él se considera el hombre más feliz y realizado del planeta…hasta que la enfermedad hace su aparición.

Uno de los sueños más recientes le hizo recordar lo mucho que le gustaba bailar cuando era niño. Aprendió con su abuela y antes de completar los estudios de secundaria se había convertido en una celebridad en su escuela por sus dotes de bailarín.

¿Dónde quedó aquel niño soñador? ¿Qué le ocurrió a su imaginación y a su sensibilidad artística y creativa? ¿Por qué no volvió a bailar nunca más?

 

La vida de Chuck se estrenó esta semana en Cinépolis y lo más probable es que solo dure una semana en cartelera. ¿La razón? La misma de siempre: es una obra maestra de la cinematografía. Esas nunca duran más de una semana. La prueba es que en el estreno solo estuvimos cuatro personas…en horario estelar.

Protagonizada por Tom Hiddleston (Loki, el hermano menor de Chris Hemsworth en la trilogía de Thor, de los estudios Marvel), y basada en una historia corta de Stephen King, esta película explora la belleza de la vida y del cosmos, y la inevitable tragedia de la condición humana.

En su punto más lírico, la película explora una serie de circunstancias que podrían resumirse con la siguiente pregunta: ¿Qué es más trágico, desarrollar una enfermedad incurable en plena juventud o descubrir que viviste una vida totalmente alejada de tus sueños y capacidades?

La muerte, al final de cuentas, es una parte esencial del ciclo de la vida. Es dolorosa pero forma parte del destino de todo aquello que nace y vive en este plano existencial. Renunciar a convertirnos en lo que ya somos, en cambio, es una tragedia que sufren millones de seres humanos en el mundo, de manera silenciosa, como una pesada losa que debemos arrastrar todos los días de nuestra existencia.

¿Qué es lo que verdaderamente importa en la vida? ¿A qué venimos?

Recomiendo ampliamente esta película. Es de ritmo lento, sobre todo al principio, pero después desarrolla una dinámica muy agradable. La escena del baile por parte del personaje principal es simplemente genial. No veía algo similar en muchos años.

Si no tienes nada más que hacer este domingo, y puedes darte una escapada al cine, entra a verla. Te gustará.

 


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